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Una inversión de 19 millones de euros solventará el problema de inundabilidad en los márgenes del Guadalfeo

· El proyecto permitiría proteger a la población en caso de inundaciones y a la vez desbloquear desarrollos urbanísticos como el TH2 y el Turístico Especial

El gran problema de inundabilidad que afecta a buena parte del municipio de Salobreña y otros vecinos podrá quedar solventado en los próximos cinco años gracias a la inversión de 19 millones de euros que llegarán a través de los fondos europeos Next Generation y que ya tienen reflejo presupuestario. La principal consecuencia de ello será salvaguardar a la población ante una gran avenida de agua, y al mismo tiempo permitir el desarrollo urbanístico previsto en ambos márgenes del río Guadalfeo que se habían quedado frenados por esta situación.

Se trata de un faraónico proyecto en el que el municipio venía trabajando desde hace varios años a través de numerosas reuniones, estudios, viajes a Sevilla y demás gestiones, y que ahora será una realidad gracias a la colaboración público-privada. La noticia de esta inversión se oficializó el pasado 20 de diciembre en la Comisión de Autoridades Competentes de las demarcaciones hidrográficas de las cuencas intracomunitarias de Andalucía. La alcaldesa de Salobreña María Eugenia Rufino, que pertenece a esa Comisión como representante de la FAMP, fue partícipe de la aprobación del documento que fue sometido a información pública.

Según ha informado la regidora esta misma mañana , dentro del apartado de ‘Medidas de Protección frente a Inundaciones’ del Programa de Medidas allí aprobado, se recoge la denominada ‘Ejecución de obras de defensa frente a inundaciones en el tramo Bajo del río Guadalfeo’, que afecta a los municipios de Salobreña y Motril. Allí se asigna un presupuesto de 19 millones de euros a invertir en el periodo 2022-2027.

Gracias a la actuaciones contempladas, no solo se protegerá a la población de ante posibles inundaciones por avenidas de agua –por ejemplo, la playa y parte del Sector Este de la Villa se encuentran dentro de esta zona de riesgo-, sino también la biodiversidad, y se desbloquearán desarrollos urbanísticos previstos en la zona como el TH2 y el Turístico Especial.

Con esta inversión se soluciona un “problema histórico” del municipio, relata la alcaldesa, quien destaca que estos desarrollos urbanísticos ya estaban contemplados en el PGOU y que fue en 2007 cuando se realizaron los primeros estudios de inundabilidad. En el año 2009 se consideró a buena parte del término municipal de Salobreña y también parte de Motril como zona de riesgo, afectando también a Molvízar y Vélez de Benaudalla. En caso de gran inundación, la superficie afectada ocuparía más de 13 kilómetros cuadrados. Rufino explica que a partir de 2016 comenzó a contemplarse una solución, aunque el gran problema pasaba por quién iba a pagar las actuaciones, algo “inasumible” para cualquier ayuntamiento.

El proyecto incluye una serie de medidas correctoras de protección ante inundaciones que pueden pasar por el ensanchamiento del cauce del río en algunos tramos y por el recrecimiento de los muros de hormigón. Por ejemplo, se contempla el recrecido del margen derecho de la rambla de Molvízar, un sistema de protección del margen izquierdo y un encauzamiento ampliado del cauce, además ampliar la capacidad de caudal bajo el puente de la N-340. En líneas generales, se barajan soluciones que combinen una revisión de las medidas estructurales existentes con otras formas de diseño que permitan el máximo grado de compatibilidad con los objetivos ambientales de las masas de agua y de las zonas protegidas, basadas en la naturaleza en la medida en que sea posible.

Para acometer el proyecto se requiere un estudio previo de coste-beneficio que analice las posibles soluciones del problema, tanto desde el punto de vista económico como ambiental o social. Si bien es la Junta de Andalucía la que debe afrontarlo, la Junta de Compensación de los terrenos que prevén desarrollarse en la zona se ha ofrecido a afrontarlo para acelerar el proceso.

Según ha aclarado Julio Roldan, ingeniero consultor de los estudios hidráulicos, aunque las medidas correctoras estarían finalizadas para 2028, no sería necesario esperar hasta entonces para iniciar el desarrollo de estos suelos, que puede ir en paralelo, y cuyos proyectos podrían comenzar a redactarse una vez que esté finalizado el estudio de coste-beneficio.