A finales de diciembre está previsto que el Ayuntamiento de la Villa celebre un pleno para debatir el nuevo presupuesto municipal, en el que se viene trabajando de forma ininterrumpida en los últimos meses, y que permitirá renovar unas cuentas que se vienen prorrogando desde 2020. Dado que los tiempos no alcanzan para debatirlo en la sesión ordinaria del 5 de diciembre, la idea es convocar una extraordinaria antes del día 20.
Así lo informó ayer en una entrevista con Radio Salobreña la teniente de alcalde de Economía y Hacienda, María Carmen Rodríguez Callejón, quien aseguró que el conflicto por la fallida moción de censura y posterior reorganización política del Ayuntamiento no influyó en el trabajo de elaboración de los presupuestos, ya que los técnicos municipales responsables tenían las instrucciones para seguir trabajando.
Los vecinos “necesitan normalidad y seguridad, y que se siga trabajando al margen de cualquier cuestión política”, explicó la edil, quien avanzó que “será un presupuesto con mucha creatividad, pues partíamos con un déficit de 3 millones de euros, lo que no permite ser muy halagüeños”. Sin embargo, afirma que “es muy importante aprobarlo, y ya en 2024 se trabajará para buscar la financiación y dinamizar los ingresos”.
La responsable municipal de Economía lamentó que estos presupuestos no hayan tenido el nivel de participación ciudadana deseado, lo cual no ha sido posible por el escaso tiempo de trabajo que se ha tenido para su tramitación. Sin embargo, espera que sí ocurra lo propio para el de 2025, a través de los consejos de participación ciudadana que se prevén crear el año próximo.
Por otra parte, la concejal destacó el gran esfuerzo que realizan tanto técnicos y trabajadores del área económica como el equipo de gobierno para “la normalización de los documentos contables”. Señala que desde julio hasta ahora se han realizado 220 contratos menores, “un reto importante porque había muchos reparos y observaciones por incumplir la tramitación administrativa en los contratos públicos”.
Todo esto ha permitido reducir notablemente el periodo medio de pago a proveedores, que ya se sitúa entre 15 y 20 días, cuando al inicio de la legislatura superaba los 130 días.
Esto no solo supondrá más rapidez para que los proveedores del Ayuntamiento cobren sus facturas, sino que también se llevarán a pleno menos expedientes de crédito extrajudicial, lo cual ha sido una constante en los últimos meses.
