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Joaquín Suárez emociona con su pregón de Semana Santa

· Ante un Auditorio lleno de público, recorrió todas las cofradías a través de sus vivencias personales y abogó por la humildad como “el don más preciado que una persona pueda poseer”

La Semana Santa de Salobreña ha dado el gran paso hacia los días grandes de procesiones y cofradías en las calles. Este sábado, el Auditorio acogió el acto más destacado de los que se celebran en los días previos: el pregón oficial, que este año ha estado en las manos y en las palabras de Joaquín Suárez Robles.

El acto comenzó con un minuto de silencio en solidaridad con Ucrania y contra  la guerra, para continuar con el tradicional concierto de la Banda de Música de Salobreña, que interpretó varias marchas, entre ellas una escrita expresamente por Javier Giner, ‘Reina de la Vega’, que dirigió él mismo y contó con la voz de la soprano Angustias Medina.

El pregonero comenzó su discurso con agradecimientos a quienes han formado parte importante de su vida, así como a los profesionales que han estado en primera línea durante la pandemia y a los voluntarios que han ayudado en todo lo que ha sido necesario, incluyendo también un ‘no a todas las guerras’. Siguió con un rosario de vivencias y anécdotas personales para continuar haciendo  un repaso histórico de la  Semana Santa local, antes de andentrarse en todas y cada una de las salidas procesionales, profundizando en las cofradías que desde el martes santo hasta la madrugada del viernes al sábado recorren las calles de la Villa, todo ello acompañado de fotografías alusivas y recordando que él mismo ha sido costalero de todos y cada uno de los tronos.

Suárez se acercó a continuación a la cruz que descansaba sobre el escenario para pedir por la paz en el mundo y “por las personas que están sufriendo en una Ucrania en una guerra que nadie entiende”. Y acabó con una reflexión sobre la humildad, de la que dijo “es el don más preciado que una persona pueda poseer” y asoció directamente con la humanidad y la solidaridad.

Finalizado su discurso, el pregonero recibió un prolongado aplauso de todo el público puesto en pie que abarrotaba el Auditorio de Salobreña.

(Foto de portada: Antonio de la O)