Esta mañana se ha celebrado en el Auditorio de la Villa el acto institucional con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en el que se ha rendido homenaje a las 52 víctimas mortales registradas en España por esta lacra en lo que va de año. Además de la lectura de un manifiesto, el acto ha contado con un breve espectáculo interactivo de danza contemporánea, fusión musical y expresión corporal.
El encargado de abrir el acto ha sido el alcalde de la Villa, Javier Ortega, quien han manifestado que el 25N no es una fecha de celebración, sino “un día para el recuerdo de todas las mujeres asesinadas por la violencia machista”. Añade que es también una jornada para la reflexión, “de sensibilización acerca de las causas de esta violencia estructural que como sociedad no podemos seguir permitiendo”.
Ortega ha explicado que desde el Área de Igualdad del Ayuntamiento están “comprometidos firmemente en la lucha contra la violencia hacia las mujeres”, trabajando desde la educación en la prevención, desde el fomento de las políticas de igualdad y desde el apoyo a todas aquellas mujeres que necesiten ayuda”.
El primer ha afirmado que contribuir a la eliminación de la violencia de género “no es una opción, es una obligación de cada uno de nosotros y nosotras porque el silencio nos hace cómplices”. Además de recordar a las 52 mujeres asesinadas en lo que llevamos de año, ha puesto también el foco en “esos niños que también son víctimas, sobre todo cuando se ejerce violencia vicaria, la peor de todas las formas posibles de destrucción e ignominia”.
Por último, ha remarcado el “firme compromiso de la corporación” con la igualdad y la lucha por la erradicación de la violencia de género en todas sus formas.
La concejal de Igualdad del Consistorio, Ángela Rodríguez, ha sido la encargada de leer el manifiesto por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que entre otras cuestiones reivindica el salir a la calle en el día de hoy por todas las mujeres “que no están, por las que tienen miedo o las que se sienten solas”.
En la jornada de hoy se han hecho públicos además los datos registrados en Salobreña en esta materia. El Área de Igualdad ha atendido en lo que va de 2023 a 28 mujeres que han interpuesto la correspondiente denuncia, si bien el número de consultas resueltas por el equipo interdisciplinar asciende a 524. De ellas, 419 han sido atendidas por asuntos referentes a la violencia de género, lo que representa el 82 por ciento del total. En cuanto al perfil en función del territorio de origen de las víctimas, solo se ha atendido a 13 mujeres extranjeras, de las que una decena son víctimas de violencia de género.
Según datos del puesto de la Guardia Civil de Salobreña, el número de denuncias desde comienzos de año hasta noviembre ha sido de
16 relativas a violencia de género y 7 por quebrantamiento de medidas de alejamiento. En total se encuentran registrados en la actualidad 28 casos activos. La colaboración y coordinación con Guardia Civil, Policía Local, Centro de Salud y Servicios Sociales “va en aumento y es muy buena”, destacan desde la Concejalía, por lo que el trabajo se hace mucho más coordinado y se facilita la interacción entre los distintos profesionales.
En cuanto al número de usuarias del servicio de teléfono de emergencia Atenpro, asciende a 15, mientras que a partir de ahora también es posible cubrir a los menores con este recurso para la protección de la víctima ante potenciales situaciones de riesgo.
Respecto al perfil de las usuarias, responde a una mujer con estudios primarios y la ESO en el 67 por ciento de los casos. Las víctimas tienen un tramo de edad de entre 30 a 39 años la mayoría, e igualmente están recibiendo una prestación económica, apoyo psicológico individualizado y apoyo jurídico. Un dato trascendente es que el 83 por ciento de las mujeres tienen menores a su cargo. El Área de Igualdad del Ayuntamiento de Salobreña está formada por un equipo interdisciplinar integrado por una técnica en Igualdad, una psicóloga y una asesora jurídica. La primera es la que atiende inicialmente a las usuarias y realiza un estudio diagnóstico de la situación. Desde el servicio de atención psicológica se ofrecen sesiones individualizadas para valorar y trabajar en las secuelas del daño psicológico sufrido; mientras que desde el servicio de asesoramiento jurídico se les ofrecen medidas de protección y se las asesora acerca de los recursos disponibles.
