Dentro de las muchas consecuencias de esta crisis sanitaria destaca también la afección a los grandes proyectos que tiene en marcha Salobreña, como la construcción del primer hotel del TH1 o la urbanización de la segunda fase de este sector. Todo estaba muy avanzado a principios de año, pero en una coyuntura en la que apenas hay actividad hotelera en todo el mundo, la alcaldesa de la Villa, María Eugenia Rufino, señala que los promotores no piensan en este momento en la apertura de nuevos hoteles.
Así lo manifestaba en la entrevista mantenida ayer con Radio Salobreña, en la que hizo balance de este año 2020. Pese a todo, afirma que mantiene un contacto frecuente con los promotores hoteleros y que estas actuaciones en la Villa “continúan en su cartera de proyectos y continuará cuando puedan”. Asimismo, destaca el hecho de que estas cadenas con base en Mallorca no han reducido sus plantillas a pesar de la crisis.
Otro asunto abordado por la alcaldesa es el de los proyectos que se gestionan a través del Ministerio para la Transición Ecológica. Rufino explica que están a la espera de mantener una videoconferencia con la Dirección General de Costas para tratar distintos asuntos, como la ejecución de las obras de urbanización pendientes en la zona de paseo marítimo de Salomar 2000 –una vez que la justicia ha determinado que así se puede hacer-; la construcción del espigón, del que se está terminando el procedimiento de calificación ambiental; o el proyecto surgido más recientemente para la recuperación de la playa entre La Caleta y La Guardia, en la fachada marítima de la fábrica.
En relación a esta zona, el proyecto de urbanización se encuentra en proceso administrativo de constitución de estatutos y de Junta de Compensación, entre otros trámites. “El proceso camina”, asegura la alcaldesa.
Una obra que había comenzado muy bien, pero después se paralizó por problemas de la empresa adjudicataria, es el nuevo vial peatonal conocido como zona verde norte del Plan Parcial Playa. En ese sentido, se está tramitando una alternativa para su continuidad.
Si bien el Presupuesto Municipal de 2020 se aprobó en el tramo final del año, según la alcaldesa era importante hacerlo para poder acometer diversos proyectos, como por ejemplo el arreglo del camino de la Cañada Genaro, gracias a una ayuda de la Junta, así como la finalización de la renovación del alumbrado público.
Por otra parte, gracias a la aprobación de las cuentas se ha podido abonar a la plantilla de la Policía Local gran parte de lo que se le adeudaba por horas extraordinarias de ejercicios anteriores. Para 2021, el objetivo que se plantea es aprobar el Presupuesto en los primeros meses del año para poder acometer inversiones.
