Habiendo registrado una participación de cientos de alumnos, los trece talleres de la Casa de la Cultura despedirán el curso con diferentes actuaciones y exposiciones a partir de las siete de la tarde..
El taller de Baile Flamenco está preparando su actuación para el acto de clausura de El Cultural.
Mañana jueves se clausura la temporada 2012-2013 de El Cultural, por cuyos talleres han pasado durante el año centenares de vecinos de Salobreña. Buena parte de lo que los alumnos han aprendido a lo largo del curso se podrá ver en los próximos días en los actos de la clausura y en las diferentes exposiciones que organizará el Área de Cultura del Ayuntamiento de la Villa.
Una de las actividades más singulares que tendrá el acto de clausura de El Cultural de mañana será el desfile de modas que se mezclará entre las actuaciones musicales y de danza que tendrán lugar desde las 19.30 en el anfiteatro. Los alumnos del taller de Corte y Confección son los autores de los variados modelos que se podrán admirar en esta pasarela, desde vestidos de mujer hasta trajes de hombre, pasando por ropa de bebé.
La crisis ha hecho que la tendencia, en diversos ámbitos del hogar, sea la de hacerlo todo uno mismo para ahorrar en gastos, y en esa línea muchas personas acuden al taller de Corte y Confección de la Casa de la Cultura. Algunas con la simple intención de aprender a coser botones o realizar pequeños arreglos, y otras que se animan a confeccionar sus propias prendas, lo que también supone un importante ahorro.
Carmen Rodríguez, monitora del taller, se ha referido en entrevista a Radio Salobreña al perfil de los alumnos que se apuntan a este taller, mayoritariamente mujeres, que al principio no tienen conocimiento alguno sobre estas labores.
Más de setenta han sido las personas que durante este curso han participado en el Taller de Corte y Confección, tanto en Salobreña como en La Caleta.
Si esta actividad requiere de mucho arte y paciencia, no se queda atrás la que se ha venido desarrollando en el Taller de Encaje de Bolillos de El Cultural, cuyos trabajos podrán disfrutarse a partir de las siete de la tarde de mañana en la exposición que se inaugurará en la Biblioteca de Salobreña.
Se trata de una tarea que a la vista puede ser muy compleja, y de ahí la popular frase de ‘Esto es más difícil que hacer encaje de bolillos’, aunque según la monitora, Paqui Jiménez, no es difícil de aprender. Al principio se trabaja con muy pocos bolillos, y una vez que se conoce su manejo se van añadiendo más. Aunque es una labor muy antigua que se utiliza en artículos tradicionales, el encaje de bolillos se está modernizando y está adquiriendo nuevos usos.
Durante esta temporada han sido en torno a una docena de mujeres las que han participado en el taller de Encaje de Bolillos. Los trabajos realizados durante este tiempo, entre los que hay abanicos, baberos o juegos de toallas, se podrán apreciar a partir del jueves en exposición de la Biblioteca.
Siguiendo con nuestro recorrido por El Cultural, llega el turno de abordar lo hecho en dos talleres que tienen la destreza y la creatividad como denominador común, Tapices y Pintura Decorativa. Ambos inaugurarán sus respectivas exposiciones en la Biblioteca Municipal.
El primero de ellos destaca por la iniciativa de la casi veintena de alumnas que lo integran, que cada vez se plantean objetivos más ambiciosos a la hora de elaborar un tapiz. Se trata de una actividad cargada de dificultad, pues según explica su monitora, Clotilde Correa, “es más difícil que la pintura, porque se trata de pintar pero con hilo”. Indica que en el primer caso, por ejemplo, “es fácil difuminar con un pincel, pero con hilo es mucho más difícil”. El taller se ha caracterizado, como es habitual, por la creación de diversos diseños que han demandado a sus autoras muchas horas de paciente trabajo. El tapiz tipo gobelino es el más popular entre las alumnas que han participado.
La monitora destaca el muy buen ambiente que reina entre las alumnas del taller, en el que se generan grandes amistades y se comparten buenos momentos durante las horas de clase.
El de pintura decorativa y porcelana en frío es otro de los talleres que cierran oficialmente su temporada. Esta acción formativa ofrece a sus alumnos la posibilidad de conocer la diversidad de las técnicas que se pueden utilizar, pues no se limita a una de ellas de forma expresa.
Quienes han seguido este taller son personas que habitualmente cuentan con tiempo libre y que además de aprovechar para aprender un arte que se puede aplicar a cualquier ámbito del hogar, tienen la posibilidad de pasar un rato agradable con otras personas con las que tienen una afición en común. Para algunos alumnos la clase sirve incluso como terapia, por ejemplo para superar una depresión.
La cantidad de participantes se ha mantenido respecto al curso anterior, pero lo que se ha notado este año es la reducción del presupuesto de los trabajos realizados. Así lo ha explicado Merche Fernández, monitora del taller de pintura decorativa de El Cultural.
Algunos alumnos ya llevan más de una década trabajando con esta monitora, por lo que durante el verano la monitora prepara nuevos trabajos que de cara al siguiente curso les pueden servir a los participantes para desarrollar nuevas ideas. Se trata de un taller donde no solo la técnica juega un papel decisivo, sino también la creatividad.
Las exposiciones de ambos talleres estarán abiertas hasta el 13 de junio en la Biblioteca y se podrán visitar de lunes a viernes de 6 a 8 de la tarde.
El taller de ballet clásico es uno de los que está celebrando sus últimos días de clase, y el balance de su monitora, Raquel Aroza, no puede ser mejor. Para esta temporada el taller contó con una treintena de alumnos, el doble respecto a la anterior, y los nuevos no tan tenido demasiados problemas para entrar en la dinámica y ponerse a la par de los que ya venían participando.
El broche final para este taller lo pondrá la actuación prevista para la jornada de clausura en el anfiteatro a partir de las 19.30 horas. Allí aparecerán numerosos personajes infantiles bailando como Pocahontas, Campanilla o Aladino. A través de ellos se consigue hacer atractivos a los niños el baile clásico.
Otro de los talleres vinculados al baile que tendrá su actuación final mañana jueves en el anfiteatro será el de Salsa, uno de los más animados y divertidos. Más de una treintena de alumnos han sido los que llegaron hasta el final del curso, pues en todos los talleres suele ser habitual que varios se queden en el camino.
El monitor del taller de salsa, Miguel Wieda, ha destacado la muy buena actitud y predisposición de todos los alumnos durante el curso, en el que el buen ambiente ha sido siempre la nota predominante.
Más allá de los nervios por la presentación en público, los alumnos de este taller ya tienen perfectamente preparados los dos bailes grupales de salsa que van presentar sobre el escenario del anfiteatro Nilo Cruz. Además, el propio Wieda junto a su mujer realizarán un número que fusionará la salsa con el tango, ya que ambos son argentinos.
Otro de los talleres desarrollados durante este año en El Cultural ha sido el de pintura. Los trabajos de sus alumnos también podrán admirarse a partir de mañana en la exposición que se inaugurará a las 7 de la tarde en la biblioteca municipal, y que se podrá visitar hasta el 13 de junio.
Francisco González Olivares es el responsable de este taller, que al contrario que los anteriores ha tenido menos alumnos, situación que el monitor atribuye a algunos cambios que los participantes no han asimilado. Pero esa situación ha permitido un mejor trabajo con los que han quedado, pues la enseñanza ha sido más personalizada. Olivares se ha mostrado satisfecho por considerar que durante este curso se han conseguido pasar barreras que otros años habían sido difíciles de superar.
Olivares señala que en muchos casos los alumnos se acomodan en las técnicas que ya conocen y no se superan, pero afirma que un pintor, por muy prestigioso que sea, siempre puede dar un paso más.
Por su parte, el taller de Informática concluyó el martes de la semana pasada y se impartió tanto en Salobreña como en Lobres y La Caleta, reuniendo en torno a un centenar de alumnos entre las tres localidades. Esta cifra marca una estabilidad respecto a los cursos anteriores, puesto que la base del alumnado ha sido muy similar. Casi la mitad de los participantes que inició el curso no tenía conocimiento alguno de informática.
A lo largo de este año han participado alumnos de todas las edades en los talleres de informática, desde los seis o siete años hasta más de ochenta.
Otro de los talleres que culmina es el de Baile Flamenco, cuyos alumnos podrán demostrar todo lo aprendido durante el curso en la gala de mañana. La actuación no será muy larga debido a la limitación de tiempo, pues son cinco los talleres que pasarán por el escenario.
Las clases se desarrollan de forma amena de la mano de la monitora, Inmaculada Gómez, quien no obstante asegura que se tiene que mostrar estricta para propiciar el aprendizaje.
Según Gómez, entre las actividades favoritas de los alumnos están las actuaciones que se realizan en diferentes galas, pues aunque implican nervios y tensión, también permiten soltar mucha adrenalina. Este año han pasado por el taller de Baile Flamenco hasta 148 alumnos de todas las edades, desde los cuatro años hasta personas mayores. La cantidad de participantes en el taller se incrementa cada año, y sin dudas se trata de uno de los más populares de los que componen el programa de El Cultural.
Como pueden comrpobar, casi todos los talleres tendrán sus respectivas exposiciones o actuaciones de fin de temporada a partir de las siete de la tarde en la Biblioteca y media hora más tarde en el anfiteatro Nilo Cruz. Sólo uno no tendrá parte activa en esta jornada, simplemente porque su contenido no lo hace factible. Es el taller de Español para Extranjeros, dirigido a personas que se afincan en Salobreña procedentes de países de habla no hispana.
Esta acción formativa les brinda la oportunidad de conocer la lengua vernácula no solo para comunicarse mejor, sino especialmente para integrarse con mayor facilidad. Diecisiete alumnos son los que participaron en ella, un número no demasiado elevado pero que, como contrapartida, ha permitido un trabajo más personalizado en cada alumno.
Si bien el trabajo de este taller se centra en las clases teóricas, también se realizan otras actividades de convivencia tendentes a que los alumnos puedan practicar el idioma. En los últimos años ha cambiado notablemente el perfil de los extranjeros que se apuntan al taller de Español para Extranjeros, según ha contado a Radio Salobreña el encargado de impartirlo, Mariano Navas.
La mayoría de los alumnos que han participado este año son de origen alemán, inglés, holandés o danés, aunque también los hay de Rumania, Irlanda o Marruecos.
Navas se ha mostrado muy conforme con los objetivos alcanzados por los alumnos, que de hecho han superado sus expectativas. La intención inicial era que aprendieran un español básico que incluyera saludos, números, días de la semana y meses del año u objetos de uso diario, entre otros. Sin embargo, asegura que han aprendido mucho más que eso. Además, también se les enseñan otras cuestiones vinculadas a España relacionadas, por ejemplo, con su geografía o su cultura.
