· La bajada de la natalidad en la Villa se hace notar en la disminución de alumnos matriculados en el curso 2014-2015, que arranca este miércoles.
El comienzo de las clases está a la vuelta de la esquina, especialmente para los más pequeños, que esta semana vuelven a las aulas de los colegios. Los centros vienen trabajando desde hace varias semanas en los preparativos para recibirlos, y en algunos casos han realizado también diversos trabajos de adecuación o mantenimiento.
En el Colegio Mayor Zaragoza serán casi seiscientos los niños que entren por la puerta el miércoles, una cantidad inferior a la de años anteriores, que el director del centro José Manuel Armada atribuye al descenso de la natalidad en Salobreña. Según ha recordado en Radio Salobreña, no hace muchos años el numero de alumnos que iniciaba el curso rondaba los 650. Con dos líneas de Infantil y tres de Primaria, el curso se inició el pasado lunes sin demasiadas novedades, aunque no será hasta esta semana cuando los alumnos acudan al centro.
El primer día la entrada será escalonada, mientras que el alumnado de 3 años tiene un plan de adaptación, incrementando gradualmente las horas que pasa en el centro. Se espera que el servicio de comedor se ponga en marcha desde el primer día, mientras que a partir del jueves comenzará el de Aula Matinal. Respecto al comedor, el director ha señalado que se han recibido un “aluvión” de solicitudes que no han podido ser admitidas en su totalidad, por lo que más de sesenta alumnos han quedado en lista de espera. El centro ha solicitado a la Administración una ampliación de los cupos de comedor, pero inicialmente la respuesta es negativa. No obstante, Armada asegura que se está valorando a través del Consejo Escolar y de la Asociación de Padres la forma de atender a todas las solicitudes con la finalidad de conciliar la vida familiar y laboral de los padres.
El Colegio Juan Ramón Jiménez ha estado abierto durante casi toda la temporada estival, ya que albergó la escuela de verano, aunque el próximo miércoles recibirá a los niños que iniciarán el curso 2014-2015. Por ese motivo se están desarrollando todavía trabajos de mantenimiento y pintura, que se espera puedan estar concluidos para el día 10, cuando está previsto el comienzo de clases.
El centro inicia el curso con nueve profesores, cantidad que disminuye respecto al curso anterior, mientras que también está a la baja el número de alumnos. Cuando hace dos años el centro disponía de nueve unidades, para el que comienza serán media docena. Anabel Aguilera, directora del Colegio Juan Ramón Jiménez, ha contado a Radio Salobreña que este curso continúan los proyectos de paz y de igualdad y convivencia.
En lo referente a La Caleta, el Colegio San Juan de Ávila también recibirá estos días a los alumnos. En este caso cuenta con la plantilla completa de profesores, una decena en total, que serán los encargados de impartir clases a los 92 alumnos que ingresan este año al centro, una cifra que se mantiene estable respecto a los últimos años. En cuanto a mantenimiento, solo se han realizado este verano trabajos de pintura. Las clases aquí comienzan el día 10 y con horario completo, no escalonado, de 9 a 14 horas. Este es el segundo curso en que el centro de La Caleta es bilingüe, y entre otros programas mantendrá el de alimentación saludable o el de salud bucodental.
El Colegio Miguel de Cervantes de Lobres también inicia su curso con una disminución en el número de alumnos. Se espera que comiencen las clases 83 en total, cuando en los últimos cuatro años la cantidad oscilaba entre los 90 y los 100. Debido a ese déficit se han suprimido dos unidades y se han tenido que agrupar a los alumnos de 3 y 4 años, y también los de Primero y Segundo. También por ese motivo se ha visto reducida la plantilla de profesorado, que el año pasado era de quince, y en este serán doce fijos, mientras que otros dos son compartidos con otros centros de la comarca. Los alumnos lobreños inician las clases el miércoles a las 10.30 horas. En Primaria lo harán todos al mismo tiempo, mientras que los de Infantil de tres años tendrán su habitual periodo de adaptación.
