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Las obras de la rotonda de entrada a Salobreña están a punto de concluir

Se está ampliando la red de imbornales para mitigar el impacto de las inundaciones por lluvias. El Ayuntamiento aclara que no será la solución definitiva al problema.


 

El Ayuntamiento de Salobreña se encuentra acometiendo por estos días en el entorno de la rotonda de entrada a la localidad unas obras destinadas a mejorar el sistema de recogida de aguas pluviales. Se trata de la continuación de otras que se realizaron hace algunas semanas alrededor de la fuente, y que tienen como objetivo evitar las inundaciones que tienen lugar en la zona cuando llueve de forma torrencial.

 

El alcalde de Salobreña, Gonzalo Fernández, ha aclarado que esta actuación no será la solución definitiva al problema, ya que además de la cantidad de imbornales hay otros factores que provocan la acumulación de agua. No obstante, ha señalado que ayudarán a mitigar el impacto de las inundaciones en uno de los puntos neurálgicos del municipio en materia de tráfico de vehículos y de personas.

 

El primer edil ha señalado que las obras “están prácticamente concluidas”, y si bien puede haber provocado inconvenientes a los comercios del entorno, a los que ha pedido disculpas, ha indicado que “redundarán en beneficio de todos”. Los trabajos finalizarán en los próximos días con el asfaltado de la zona en la que se ha actuado y el pintado de la señalización horizontal.

 

El alcalde ha destacado que estas obras se complementan con los cambios que se han realizado en el tráfico en esta zona, y que terminarán de hacerse efectivos una vez se terminen los trabajos. Por otra parte, Fernández ha advertido que se están ejecutando obras por parte de la empresa Gas Natural para ampliar su red de canalizaciones, algunas de las cuales tienen lugar en calles recientemente asfaltadas.

 

El primer edil ha explicado que el calendario de acometidas no depende del Ayuntamiento, sino de la demanda y necesidades de la propia empresa. No obstante, ha indicado que en todos los casos se le requiere a la compañía que una vez concluidas las obras, los viales se queden en las mismas condiciones en las que se encontraban. Por tanto, ha negado que se trate de falta de planificación, y ha señalado que en las obras que se realizan en el entorno de la plaza Picasso no existía otra opción que la de levantar parte del asfalto recientemente implantado.