El acto, celebrado el sábado antes de las actuaciones del Lucero del Alba, fue multitudinario, con la presencia de la viuda y los tres hijos del matrimonio, Estrella, Soleá y José Enrique Morente, además de tíos y demás parientes.
La viuda e hijas de Enrique Morente posan junto a la escultura dedicada al cantaor granadino. Foto: Colin.
Este sábado, y dentro de los actos incluídos en el Festival Flamenco Lucero del Alba, se inauguró en el Casco Antiguo de Salobreña un mirador dedicado al cantaor granadino Enrique Morente. El acto tuvo lugar a las 20:30 horas, poco antes de las actuaciones musicales programadas en el Paseo de las Flores, contando con la presencia de la familia del artista.
El mirador, antes denominado “Mirador del Albaycin”, cuenta con una escultura que muestra una cabeza de Morente mirando hacia el mar y hacia la Vega. El diseño es de Aurora Carbonell, viuda del cantaor, que tras la muerte de su marido ha volcado todas sus energías en la pintura. La obra, a base de forjado, es de Javier Arteta.
El acto que fue multitudinario con la presencia de la viuda, y los tres hijos del matrimonio, Estrella, Soleá y José Enrique Morente, además de tíos y demás parientes. Y es que la ocasión lo requería: Según contó el viernes a Radio Salobreña Aurora Carbonell, la familia pasó muchos veranos en la localidad costera y tiene muchos recuerdos de felicidad y nostalgia.
El concejal de Cultura, Antonio Rabaneda, comenzó el acto leyendo una carta que dedicó a Enrique Morente, un emotivo texto al que acompañaba en todo momento el sonido de una guitarra.
Estrella Morente dio las gracias al pueblo de Salobreña por esa obra que calificó como “maravillosa”, al escultor Javier Arteta, por crear esa escultura soñada y diseñada por su madre para que el aire, la lluvia y el viento se colapsaran en la cabeza de Morente».
«Estoy superorgullosa y muy ilusionada», decía por su lado Soleá Morente. «Es una sensación que experimento por primera vez. Una sensación rara. Este tipo de cosas nos hacen mucha falta y nos hacen muy felices, muy muy felices».
El alcalde de Salobreña, Gonzalo Fernández, también se mostró emocionado: «En este mirador Enrique mira hacia el infinito, mira hacia al mar, hacia la vega de Salobreña y mira hacia el futuro. Porque siempre ha tenido una vinculación muy directa con Salobreña y lo hemos sentido en el corazón. Enrique permanecerá por siempre aquí con este pequeño rincón».
El Mirador Enrique Morente está muy cerca del Paseo de las Flores, a los pies del Castillo de Salobreña donde el sábado, además, el Festival Lucero del Alba ofreció a los amantes del flamenco un cartel de excepción: todos los hijos de Morente actuaron como cierre del certamen. En la edición también estuvieron presentes el cantaor David de la Jacoba y el salobreñero Manuel El Canario. Y como es habitual, pariticparon los miembros de la Peña Flamenca La Trilla de Salobreña con Julio Fajardo al cante, José Fajardo a la guitarra y la bailaora María Dolores Pérez González.
