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La corporación municipal de Salobreña alcanza la ratio que establece la Ley de Paridad

Participantes en el debate junto al locutor Eduardo Cruz.
· Tras la incorporación de Yolanda Rodríguez los concejales de la Villa pasan a ser diez hombres y siete mujeres. Radio Salobreña ha celebrado un debate en el que han participado cuatro mujeres con responsabilidades en el ámbito directivo.
 
 
Tras la toma de posesión de su acta el pasado lunes de la concejal andalucista Yolanda Rodríguez Galindo, la corporación municipal de Salobreña ha alcanzado la ratio que establece la Ley de Paridad, que busca que la mujer sea más visible en los órganos de representación, y según la cual cada género debe estar representado en al menos un 40 por ciento. En la Villa se ha alcanzado ese nivel al contar ahora la corporación con 10 hombres y siete mujeres, mientras que en Motril el Consistorio tiene mayoría femenina, con trece mujeres y doce hombres, y también Almuñécar, con once y diez respectivamente.
 
Esta cuestión ha sido el disparador del debate celebrado esta mañana en Radio Salobreña, en el que han participado las concejalas de Igualdad de Salobreña y Motril, Mari Carmen Rodríguez Callejón e Inmaculada Torres, respectivamente, junto a Mari Carmen Cubero, ex directora del Colegio Mayor Zaragoza de Salobreña, y Eva Haro, psicóloga especialista en género y presidenta de la Asociación Habilis. Cada una de ellas ha expresado su opinión sobre la Ley de Paridad y sobre si su aplicación ha surtido efectos positivos.
 
Para la edil salobreñera Mari Carmen Callejón, es importante que exista una ley que regule estas cuestiones, pues considera que con ella se consigue una mayor visualización de la mujer. No obstante, cree que no es suficiente y que todavía hay mucho por hacer en ese sentido, ya que las mujeres siguen luchando por conseguir su puesto en la sociedad.
 
Por su parte, Inmaculada Torres está de acuerdo en que hay que hacer visible el papel de la mujer, pero no con que haya una ley que obligue a que ocupen determinados puestos, pues asegura que deben valer por su capacidad. Considera que se debe seguir trabajando por ese objetivo y que esta lucha no va a tener fin, al opinar que cada género peleará por su espacio.
 
Torres destaca que en Motril, tanto en el equipo de gobierno como en la corporación, las mujeres son mayoría, y añade que en la Costa hay muchas mujeres que desempeñan trabajos importantes y las administraciones locales deben trabajar para hacerlas visibles.
 
Para Mari Carmen Cubero, esta ley ha permitido hacer visible a la mujer, y está de acuerdo con ella por considerar que lo que busca es que esté representada la humanidad en sí, y como en ella hay hombres y mujeres, ambos tienen que estarlo. No obstante, cree también que la mujer vale por su capacidad y no por el solo hecho de ser mujer.
 
Según la psicóloga Eva Haro, es necesaria una normativa de este tipo para conseguir la igualdad y que apueste por ella, pues cree que “no es suficiente con voluntades”. Indica que hasta que no salió la ley la mujer no se veía reflejada y que la discriminación positiva es necesaria para lograr esos espacios. Según Haro, es una carrera de fondo donde las mujeres parten cinco pasos por detrás, y además tienen que sortear más obstáculos.
 
Haro asegura que muchas mujeres ahora pueden conseguir un título y están muy formadas y capacitadas, pero una vez que salen al mercado de trabajo se encuentran con un techo. Y añade que muchas de las que llegan a puestos altos deben asumir un modelo masculino. Inmaculada Torres no está de acuerdo con este punto, y agrega que la mujer tiene otra sensibilidad y otra forma de negociar.
 
Desde su lugar de educadora, Mari Carmen Cubero asegura en este ámbito se ha avanzado mucho en lo referente a paridad, aunque es en las propias familias donde no hay igualdad, “es en la formación familiar donde está el principal problema”. Si bien van quedando atrás algunos estereotipos como el rosa y el azul según el sexo o los juguetes, muchas veces las culpables son las propias madres. Por último, Rodríguez Callejón destaca que a muchos hombres les cuesta trabajo asumir que una mujer sea su jefa, y la solución pasa por reconocer el derecho a la igualdad.