Con esta instalación se pretende prestar servicio a los enfermos y familiares de la Costa Tropical. El martes día 8 a las 6 de la tarde se ofrecerá a los interesados una charla informativa en el Ayuntamiento de Salobreña.
Instalaciones de la unidad de estancia diurna de la Asociación Parkinson Granada con sede en la capital.
La Asociación Parkinson Granada Ágora tiene en los planes abrir una extensión en Salobreña y en otras localidades de la Costa, con el fin de prestar sus servicios a las personas que padecen esta enfermedad en la comarca, así como a sus familiares. Para dar a conocer su funcionamiento y su actividad, la entidad ofrecerá el próximo martes 8 de noviembre a las 18 horas una charla informativa en los seminarios del Ayuntamiento.
En la charla se abordará qué es y como se desarrolla la enfermedad de Parkinson, cuál es la labor que lleva a cabo esta asociación y qué servicios se van a ofrecer en el municipio con la puesta en marcha de su extensión. Desde el Ayuntamiento ya se ha comprometido toda la ayuda posible por tratarse de una entidad sin ánimo de lucro, aunque por el momento no se podrá traducir en aportaciones económicas.
La Asociación Parkinson Granada Ágora ofrece una atención integral tanto a los enfermos como a los familiares cuidadores, con el objetivo de mejorar su calidad de vida. María José García, concejal de Bienestar Social del Ayuntamiento de Salobreña, destaca que para implantarse finalmente en el municipio la entidad necesita dar a conocer su actividad y los servicios que presta.
El Parkinson es una enfermedad neurodegenerativa cuyo desencadenante es desconocido, y probablemente se deba a diferentes factores de tipo ambiental, genético, envejecimiento prematuro cerebral y otras causas. Afecta por igual a todas las razas y sexos, teniendo una prevalencia de un caso por cada 1.000 personas. Se estima que en Granada existen unos 2.500 casos. Por lo general, la enfermedad afecta a personas mayores de 65 años, aunque se observa que cada vez aparecen más casos antes de esa edad, llegando a afectar a personas de hasta treinta años, el llamado Parkinson juvenil.
