La recién creada asociación juvenil Salubinya ha conseguido reparar siete de los nueve que tiene el Ayuntamiento, que estarán en el desfile de mañana viernes tras permanecer varios años encerrados.
Jóvenes de la asociación Salubinya en plena tarea de restauración de los cabezudos.
Las fiestas patronales de Salobreña llevaban años sin el tradicional desfile de cabezudos que integraba el pasacalles inaugural. El motivo no era otro que su mal estado de conservación, que obligó a dejarlos encerrados durante mucho tiempo. Pero este año volverán a salir gracias a la iniciativa de una asociación juvenil de reciente creación llamada Salubinya, que se ha propuesto restaurarlos para que vuelvan a animar las fiestas salobreñeras.
Tras haber organizado una gymkhana en el verano, este grupo de jóvenes decidió integrarse en una entidad, cuya primera actividad ha sido la reparación de estas figuras cuyo fin es animar la celebración. En colaboración con la Concejalía de Fiestas, que aportó los materiales necesarios, se pusieron manos a la obra a finales de agosto y llevaron a cabo esta tarea de reparación, que les ha demandado más de un mes.
De los nueve cabezudos que había, los miembros de Salubinya consiguieron restaurar siete, que son los que saldrán mañana a las 19.30 en el pasacalles que estará acompañado por la Banda Municipal de Música de Salobreña. Los dos restantes no se han podido arreglar por falta de tiempo, aunque la asociación se ha comprometido a hacerlo de cara a las próximas fiestas.
Quienes han llevado a cabo esta tarea no son profesionales en la materia, pero con buena voluntad han logrado el objetivo de repararlos con la finalidad de recuperar una tradición que muchos salobreñeros recuerdan con cariño de sus años de niñez. Pretenden además que los niños de ahora vivan también esa experiencia que también causaba miedo, pues cualquiera podía ser perseguido por estas figuras gigantes.
Por otra parte, Salubinya ha organizado para el sábado una actividad para los más pequeños. Una decena de sus integrantes estará desde las 12 de la mañana en el parque La Fuente celebrando talleres de bolitas de arroz, pulseras, llaveros, pintura de cara y molinos de viento.
Durante el invierno la asociación pretende seguir realizando actividades para la juventud, en una época en la que no hay demasiadas propuestas para el colectivo. También pretenden darse a conocer para que se sumen más jóvenes.
