La nueva ponencia de valores hará que tributen inmuebles que hasta ahora no lo hacían. La oposición criticó que se produce una subida, mientras el equipo de gobierno recuerda que hay que hacer frente a la deuda heredada.
El Pleno ordinario celebrado ayer tarde noche por la corporación municipal salobreñera se destacó, aparte de por su duración -eran más de una docena de puntos más ruegos y preguntas- por los debates económicos. Y es que entre los puntos 4 y 5, los portavoces emplearon una hora y veintiséis minutos. Los temas lo merecían, sin duda, tanto la modificación de la ordenanza fiscal sobre el IBI como la de la referente a la recogida de basura.
La primera contemplaba una rebaja del tipo impositivo, que es la tabla que aplica el Ayuntamiento, del 0,85 al 0,80 para un recibo de la contribución que llega por vez primera desde hace 16 años con una nueva ponencia de valores merced a la revisión solicitada al Catastro. En cuanto a la basura, son varias las novedades presentadas por el equipo de gobierno, entre ellas, cobrar por tramos lo que se venía cobrando de forma unitaria hasta ahora, de manera que mientras los negocios y establecimientos hoteleros pagaban hasta ahora la misma tarifa, a partir de 2014 lo harán en función de los metros cuadrados en el caso de los comercios y por número de habitaciones para los establecimientos de alojamiento.
Unas medidas que para el equipo de gobierno suponen una clara bajada general en ambos casos y que la oposición ve justamente al revés, con subidas en el caso del IBI y con la peor parte del pastel para los vecinos de a pie en el caso de la basura.
El gobierno municipal está convencido de que la revisión de la ponencia de valores sobre los inmuebles urbanos era necesaria, primero porque la última se produjo en 1997 y hubiera correspondido la revisión en 2007; segundo porque viene a establecer un valor más equilibrado y equitativo en viviendas con valores obsoletos, así como en aquellas que han sufrido algún tipo de ampliación o las que nunca han ejercido su obligación de tributar. Y además se ha delimitado por zonas el municipio para que en función de su ubicación las casas coticen más o menos.
El portavoz del PA puso por delante su oposición a la modificación porque a su juicio supone que el ciudadano pague más. José Pérez puso en cuestión además el hecho de que universitarios se puedan ver afectados a la hora de solicitar beca en aquellos casos en que la vivienda familiar alcance un valor a partir de 47.000 euros. En este aspecto incidió también el portavoz de IU, quien se puso como ejemplo de ciudadano que va a pagar más después de esta revisión, no sólo en el recibo de IBI sino también en el IRPF por el incremento del valor de su vivienda, un piso medio del Sector Este de la Villa.
Angel Coello hizo una comparación con Motril para hablar de catastrazo y señalar que todas las viviendas se multiplican por 2,5 o 3, ya que según recordó el IBI en Salobreña ya ha subido el 10% del decreto de Rajoy más el 20% que aplicó para este año el gobierno municipal, y que por tanto el ciudadano va a pagar más aunque el ayuntamiento rebaje el tipo impositivo.
El portavoz del PP abundó sobre estos extremos para concluir que el IBI tiene truco. Así lo dijo Rubén Rodríguez, quien enumeró tres críticas al equipo de gobierno. La primera, pedir la ponencia de valores; se podía haber hecho de otra forma, por sectores, dijo, para añadir que el valor de mercado hoy es muy subjetivo y desde luego por debajo del de 2007, así que se podía haber pedido más sensibilidad y flexibilidad a los técnicos del catastro.
La concejala de Economía y Hacienda defendió el trabajo del catastro y de los técnicos. “Se trata de que todo el mundo pague con respecto a los metros cuadrados de su vivienda, buscando la equidad”. Tachó al portavoz de IU de desinformar aportando datos dispares, mientras que respondió al PP que “hay que aplicar un tipo impositivo que permita pagar la deuda dejada por su partido”.
El portavoz del PA dijo en su segundo turno que no es obligatorio realizar la revisión de la ponencia. Prr su parte, Angel Coello afirmó que la obligación de la ponencia no es del Ayuntamiento, que lo que ha hecho es aplicar la fórmula que le planteaba la Intervención municipal para poder realizar los ajustes necesarios en el presupuesto en aras de una estabilidad.
El alcalde recordó que la revisión de la ponencia arrastra un retraso de seis años y que era necesaria, entre otras cosas porque había quien no pagaba lo que le correspondía por su vivienda.
“Hay que hacer frente a la deuda”, dijo el alcalde, quien defendió que la ponencia viene a actualizar valores obsoletos y a que pague más quien más tiene.
El PA votó en contra, mientras IU y PP se abstuvieron. El punto se aprobó, pues, con los votos del equipo de gobierno.
