· La conferencia con ese título ha corrido a cargo de Patricia Ramírez Loettfer, quien señala que hasta ahora la educación ha tenido carácter autoritario. Salobreña también acoge estos días un taller creativo sobre la técnica del stencil.
La Casa de la Cultura acogió el martes la inauguración de las XVI Jornadas de Educación Infantil en un acto presidido por el alcalde de la Villa, Gonzalo Fernández Pulido, y el director del Centro de Profesorado de Motril, entidad organizadora de las mismas, Jose Antonio Gutiérrez Rodríguez.
Casi un centenar de profesionales participan en esta decimosexta edición en la que que durante tres días debaten y comparten experiencias sobre un tema de gran actualidad como es “la necesidad de crear una escuela que de cabida a todo tipo de alumnado dando respuesta a sus necesidades educativas, tanto si es de capacidad, nacionalidad o comportamiento”, tal como indicaba el primer edil en su intervención.
Estas jornadas celebraron ayer su segunda conferencia relacionada con la felicidad en el ámbito educativo. ‘Educar para ser feliz’ es el nombre de la conferencia que ha estado a cargo de Patricia Ramírez Loettfer, quien señala que hasta ahora la educación ha tenido carácter autoritario y ha hecho más hincapié en el sufrimiento. Por el contrario, su propuesta es educar para ser feliz.
Dentro del programa del Encuentro se incluyen también tres talleres. Uno de ellos, que comenzó el martes con gran éxito de participación, es el de creatividad que se imparte a través de la Academia D’Arte de Motril, denominado ‘El Stencil, una técnica divertida’.
El stencil no es una técnica novedosa, ya que se viene utilizando desde la pintura rupestre, pero por su relación con el arte y con el graffiti ha cobrado cierta actualidad en las últimas décadas. Consiste en utilizar una plantilla con un dibujo recortado a la que se aplica pintura, obteniéndose un dibujo que se puede reproducir en serie.
El stencil tiene un uso extendido en distintos ámbitos de la vida cotidiana como la publicidad, cartelería o señales de tráfico horizontales. Pero en este caso se pretende aplicar al aula infantil, de forma que el profesorado domine la técnica para su aplicación en murales y otros trabajos plásticos.
A través de tijeras y punzones, los niños pueden realizar sus plantillas y crear trabajos óptimos y de buena calidad. Pero más importante que el resultado para el alumnado es el proceso creativo. El profesorado se está mostrado muy participativo en este taller, pese a que la planificación de estos trabajos requiere mucho tiempo fuera del horario laboral.
