En entrevista a Radio Salobreña, Gonzalo Fernández ha calificado de día histórico el 20 de octubre, pero apela a la solidaridad con las víctimas de ETA. Lorena Fernández, una vasca que decidió autoexiliarse en Salobreña, habla de un triunfo de ETA y un golpe mediático para las elecciones.
Todos los medios de comunicación hablan sobre el abandono de la lucha armada por parte de ETA.
Práctica unanimidad entre los partidos políticos a la hora de valorar el comunicado de ETA como un paso histórico hacia una convivencia democrática y en paz. El sentimiento de alivio por el vuelco que tomará a partir de ahora el día a día en el País Vasco, con la posibilidad ciudadana de expresarse sin coacciones y sin miedos le da un tinte completamente diferente a la situación. Ni el hecho de que el comunicado anunciando el cese definitivo de las acciones armadas fuera algo cantado desde hace días ha mermado un ápice la reacción a una de las formaciones políticas democráticas y de la gente de a pie con respecto a la importancia del mismo para iniciar el camino de la paz.
Lo que viene después, la segunda lectura y las demás, ya son objeto de matices diversos, aunque la coincidencia es también casi generalizada en cuanto a las omisiones de ETA, que ni ha anunciado su desaparición ni ha perdido perdón a las víctimas. Y eso era también algo necesario para sus familiares y entorno que nunca van a poder recuperar a sus seres queridos muertos por el capricho de una banda de asesinos. Por eso se alzan también las voces que reclaman justicia y solidaridad con las víctimas. Una de esas voces es la del alcalde de Salobreña. Gonzalo Fernández Pulido va a ser el primer alcalde en décadas que no va a tener que presidir minutos de silencio a las puertas del Ayuntamiento por atentados terroristas y por eso considera el de ayer como un día histórico, pero no ha querido olvidar a los que sufrieron y siguen sufriendo.
El alcalde de la Villa, en entrevista esta mañana en Radio Salobreña, no ha querido dejar pasar el papel de los gobiernos para lograr el objetivo de aislar a ETA, lo que ha propiciado su debilidad y el paso dado ahora, y ha insistido en la necesidad de, en temas de Estado remar en la misma dirección los partidos políticos como han hecho en el País Vasco para lograr los objetivos que al final desembocarán en la paz en ese territorio después de más de 40 años de terror.
Han sido muchos a lo largo de los últimos años lo vascos que han abandonado su tierra y se han autoexiliado para dejar de vivir en la situación de miedo constante que les imponían las pistolas y la violencia de ETA. Entre ellos se encuentra Lorena Fernández, una arquitecta, esposa de un guardia civil e hija de una concejala que cuando dio a luz a su hija escogió que ésta no tuviera que pasar por la vergüenza de ocultar a su familia.
Para Lorena este comunicado es un triunfo de ETA, un paso que tienen que dar ante las concesiones recibidas. Concesiones que pasan por estar representados en las instituciones vascas y la posibilidad de estarlo en Madrid tras las elecciones del 20-N. «Lo que ha dado la banda terrorista es un golpe mediático de cara a las elecciones y habrá que esperar a después del 20 de Noviembre para ver cómo se sustancia este anuncio», ha manifestado Lorena Fernández, quien se define como incrédula y escéptica ante esta nueva escenificación de la banda. No duda nuestra vecina enseñar que la sociedad vasca está podrida por estos elementos y sus adláteres y acabar con ello va a resultar muy difícil. Ella por lo pronto recuerda con amargura lo vivido para ejemplificar sus afirmaciones.
Nuestra convecina dice que hay que ser cauto y esperar a ver qué pasa tras las elecciones, pero asegura que en el País Vasco no hay libertad, que ésta tardará en llegar si es que llega y que ella no va a volver a la tierra que le vio nacer y en la que pasó más de la mitad de su vida. Prefiere quedarse entre nosotros, en un pueblo donde ha sido muy bien acogida junto con su familia y donde se siente totalmente integrada.
