Hoy han sido eliminadas las cintas rojas que impedían el acceso de los ciudadanos a las dependencias del mismo, una decisión que ya había anunciado en campaña, y que hoy, nada más comenzar su jornada laboral ha cumplido, atendiendo a las demandas que le hacían los ciudadanos.
“Las puertas del Consistorio están desde hoy abiertas a todos los vecinos y vecinas de la Villa, queremos que la transparencia y el contacto directo con los ciudadanos sean la seña de identidad, de una nueva forma de gobernar”, señalaba el Alcalde. Algo que no impedirá el normal funcionamiento de la Oficina de Atención al Ciudadano, situada en la planta de entrada del edificio y que seguirá como hasta ahora, tramitando las diversas solicitudes de los vecinos y ofreciendo información a todo aquel que lo necesite.
De hecho, añadía Gonzalo Fernández, “la Oficina de Atención al Ciudadano, cuando esté a pleno rendimiento, facilitará las gestiones a los ciudadanos y el trabajo interno de todos los departamentos, pero, a partir de hoy queremos que esa barrera simbólica que significaba la cinta roja colocada en los accesos al Ayuntamiento desaparezca, entrando en una nueva etapa donde la gestión será clara y participativa”.
