Solo unos pocos puestos han decidido levantar la persiana tras semanas sin poder atender a sus clientes. Las obras en el edificio se prolongarán para la habilitación de un parking subterráneo.
Tras un mes cerrado por obras, hoy ha vuelto a abrir sus puertas el mercado municipal de Salobreña. Aunque solo unos pocos puestos han decidido levantar la persiana para atender al público, los vecinos ya pueden acudir a este núcleo comercial para hacer sus compras y comprobar los cambios que ha experimentado después de la reforma.
Según el acuerdo al que habían llegado el equipo de gobierno y los concesionarios, en un mes han terminado las obras en la planta donde funcionan los puestos, a falta de pequeños remates de pintura. Por lo demás, las obras en el edificio continuarán durante un mes más en la zona del subsuelo, donde se habilitará un parking público con una treintena de plazas.
El edificio luce un aspecto más moderno, con una decoración colorida en la zona del techo, donde se ha instalado un sistema de extracción para evitar las altas temperaturas que se sufrían en verano. Otro de los puntos destacados es el nuevo suelo antideslizante, que sustituye al antiguo, que era muy resbaladizo, especialmente en los días lluviosos.
Otros cambios importantes tienen que ver con los aseos, que han sido completamente renovados, y la fuente central, que ha sido retirada y en su lugar se han colocado en el suelo unos vistosos escudos de Salobreña cubiertos por un cristal traslúcido.
En cuanto al funcionamiento interno del recinto, se ha anulado el pasillo que existía detrás de los puestos, que se han visto ampliados al incorporar ese espacio. También se ha abierto un muelle de carga y descarga sobre la avenida Federico García Lorca, lo que supondrá una adecuación en el acerado para facilitar el acceso de los vehículos sin interrumpir el paso de los peatones. Aún se está estudiando el diseño, aunque posiblemente se habilite un carril específico para carga y descarga, separado de la senda peatonal.
Las modificaciones realizadas, que supondrán un cambio de hábitos en la rutina de los puestos, responden a criterios puramente sanitarios y para adaptarse a la normativa, según ha explicado el concejal de Obras y Urbanismo, Javier Ortega.
Para resolver el problema de las altas temperaturas en verano en el interior del recinto se habían barajado distintas opciones, y finalmente se optó por instalar un sistema de extracción forzada que alcanza los 7.000 metros cúbicos a la hora, lo que permite renovar el aire de forma permanente.
En lo referente al parking, que será de pago, el Ayuntamiento está estudiando la fórmula más conveniente para gestionarlo. La alcaldesa ha afirmado que se contemplan todas las opciones, tanto de explotación pública como privada.
Otro punto destacado es la señalización, tanto interior como exterior, que se acometerá en esta segunda fase de la obra. Y es que hasta el momento no existía cartelería en la entrada del pueblo que indicara cómo llegar a este edificio, algo que se antoja “muy importante”. Según ha explicado la alcaldesa, “uno de los atractivos de este mercado es que tiene mucha clientela del resto de la comarca, al ser uno de los pocos que abre los domingos, y como viene mucha gente de fuera la señalización es importante”.
María Eugenia Rufino ha destacado que “se ha cumplido tanto en cuanto a plazos como a contenidos de la obra, e incluso mucho más de lo que se había planteado inicialmente, porque hemos tratado de atender todas las demandas que nos han hecho los concesionarios”. Por eso ha hecho un llamamiento a este colectivo para abran sus puestos y “que el mercado empiece a funcionar lo antes posible, para que entre todos hagamos que sea un atractivo más de Salobreña”.
