El Ayuntamiento de Salobreña, a través del área de Obras y Mantenimiento, ha llevado a cabo los trabajos de arreglo del gimnasio del anejo de Lobres con los que se ha dado respuesta a una demanda vecinal histórica. La intervención ha consistido en eliminar los graves problemas de humedad que atacaban a una de las salas y remodelar la entrada para acabar también con las barreras arquitectónicas.
Desde la anterior reforma del edificio, en el gimnasio se generaban humedades que conllevaban otros desperfectos en las instalaciones como la rotura continúa de la pared de espejo. El concejal de Lobres, Nelson Ligero, ha explicado que se hizo un estudio previo para conocer el origen del problema y atajarlo desde la raíz.
Así, se ha sustituido la instalación de la fontanería exterior y se ha colocado una cámara de aire, lo que ha terminado con los problemas de humedad. “Un trabajo que no se ve a simple vista pero que ha supuesto la solución final”, ha apuntado Ligero aclarando que con esto además se evitará el cambio continúo del espejo. El interior de la sala se terminará con unos detalles de pintura y la limpieza de este espacio.
Por otro lado, se ha arreglado el acceso a estas instalaciones con la colocación de una rampa y barandilla nueva eliminando también las barreras arquitectónicas. Cabe recordar que este edificio es uno de los más usados del anejo ya que, además de la sala de gimnasia, alberga la sala de máquinas y el aula de formación en la segunda planta. “Lo usan desde mayores, con las actividades programadas para ellos como la gimnasia de mayores, el Tai Chi o el yoga, hasta los más pequeños con los talleres deportivos como el kárate o la gimnasia rítmica”, ha agregado el edil.
El concejal de Lobres, Nelson Ligero, ha recordado no obstante que, con las nuevas medidas restrictivas decretadas por la Junta de Andalucía, el gimnasio permanecerá cerrado hasta nueva orden, siguiendo las normas para evitar la propagación del Covid-19.
