“Un momento histórico”, como ella misma lo ha definido, en el que ya expresaba el principal criterio que seguirá en los próximos cuatro años: “Aunque el pueblo me haya otorgado el poder no es autoridad, por ello devuelvo el poder al pueblo que es quién debe tenerlo siempre”.
En una sencilla pero vistosa sesión, en la que el Auditorio de la Villa se conviritó durante una hora en salón de plenos, se llevó a cabo este sábado la ceremonia de constitución de la nueva corporación municipal de Salobreña y la elección de la alcaldesa. Y aunque el nombre estaba cantado, el momento no estuvo exento de una cerrada ovación por parte del público que llenó el recinto puesto en pie, al igual que todos los concejales y miembros de la mesa que ocupaba todo el escenario.
El protocolo era simple: constitución de la mesa de edad, compuesta por el edil electo mayor, en este caso Ángel Coello Infantes, de IU, y el más joven, Rocío Castañeda, del PSOE. Y fueron ambos, quienes, tras las primeras palabras del secretario, condujeron el desarrollo del acto. Cotejo de credenciales, primero, y después el juramento de los nuevos ediles. El texto está reglado por la Ley Electoral y permite que se utilice la fórmula de juro, prometo o juro y prometo. Aunque luego hubo algunas frases de cosecha propia introducidas por algunos ediles más allá de la conocida «por imperativo legal», que fue mayoritaria.
Concluido este trámite se procedió a la votación, que fue nominativa. Cada partido votó a su propio cabeza de lista, de manera que fue María Eugenia Rufino Morales, con los nueve votos socialistas, la candidata más votada y proclamada, por tanto, alcaldesa de Salobreña.
La nueva alcaldesa recibió el bastón de mando de manos del subinspector jefe de la Policía Local y lo mantuvo en todo momento en plano horizontal compartiéndolo con el público y con todos. «Con este gesto devuelvo el poder al pueblo que es quien tiene que tenerlo siempre», dijo en el arranque de su discurso, para añadir su intención de dibujar una nueva forma de trabajar para todos y con todos, equipo de gobierno, oposición y ciudadanía.
Rufino Morales expresó su objetivo de ser alcaldesa de todos y anunció su intención de afrontar todos los problemas, desde lo más cotidianos, como la limpieza, hasta los más trascendentes, como el empleo. En este sentido afirmó que hay mecanismos para que el Ayuntamiento pueda participar en la generación de trabajo. Luego, ante los micrófonos de Radio Salobreña, que transmitió en directo el acto, habló de la necesidad de aprobar el PGOU y del desarrollo rápido de TH1, TH2 y Plan Parcial Playa. «Tenemos que poner todos los instrumentos al servicio de ello», señaló para referirse a continuación al turismo y a la necesidad de continuar con la rehabilitación del Castillo y poner en valor el Casco Antiguo como señas de identidad de la Villa. Y abogó por la aprobación inmediata del presupuesto municipal.
Por otro lado, defendió un Ayuntameinto de puertas abiertas, no sólo desde los políticos, sino también desde los funcionarios. «La modificación inmediata de ciertas ordenanzas va a permitir la corrección de ciertos desajustes para una mejora del trato directo funcionario ciudadano».
En medio, dijo, hay un programa lleno de medidas que serán de lectura obligada cada día. Reiteró su intención de activar la junta de portavoces para hacer más partícipe a la oposición de la acción de gobierno, así como escuchar sus propuestas.
Y en cuanto al equipo de gobierno, aunque reconoce que, tal como marca la ley, el peso recaerá sobre los cinco primeros, todos van a llevar áreas, se buscarán para ello liberaciones parciales u otras fórmulas posibles.
Además del propio recinto donde se celebró, el pleno de investidura ha tenido como novedad el que por vez primera los cabezas de lista de los grupos de la oposición pudieron tomar la palabra. Fue la nueva alcaldesa quien lo autorizó aunque no estaba en el protocolo. Los cuatro intervinientes coincidieron en felicita a la nueva alcaldesa y desearle suerte en su andadura.
Mari Carmen Vílchez Guirado, del PP, abundó sobre la premisa que viene defendiendo durante la campaña, pero sobre toda tras las elecciones: trabajar por Salobreña. Vílchez Guirado se marca estos cuatro años además para adquirir experiencia en las lides municipales, los cuatro concejales son nuevos, e intentar recuperar a su electorado.
En entrevista posterior con Radio Salobreña, la portavoz popular se refirió a la dimisión del hasta ahora presidente del partido, señalando que no afectará para nada a la marcha del mismo y que habrá que esperar al congreso que se podría celebrar tras el verano para conocer el nombre del nuevo presidente, sin desvelar si ella se postula para dicho cargo.
Por IU, Ángel Coello manifestó su deseo de “ver democracia en el nuevo ayuntamiento después de décadas de falta de información y transparencia», e invitó a que éste sea un gobierno para todos y no sólo para los que lo han votado.
“Además de la deuda son otros los problemas de Salobreña”, continuó Coello, quien enumeró pan, techo, trabajo y dignidad, las máximas de la campaña de IU. Pidió que se busquen medidas con los bancos para acabar con los desahucios y que se mire por las personas y familias necesitadas. Por último se puso a disposición del nuevo gobierno para «repensar la ciudad» y ver entre todos qué modelo de ciudad queremos para Salobreña.
Juan Collado Flores, del PA abogó porque Salobreña despegue después de anunciar una oposición constructiva pero crítica. «Donde nos busque nos va a encontrar siempre que sea en favor de Salobreña», concluyó el líder andalucista.
En términos similares se manifestó la edil de Ahora Sí Salobreña, Rosario Martín Venegas. Tras recordar que Ahora sí es Podemos, su representante expresó su intención de seguir en la calle escuchando y atendiendo a los problemas de los vecinos.
En su discurso, la nueva alcaldesa señaló que de las palabras de la oposición se deduce que «podremos dibujar una nueva forma de trabajar», para añadir que les devolvía la propuesta de colaboración entre el gobierno y el resto de grupos municipales.
