Podría tratarse de una bengala de las que usan las fuerzas de seguridad. La alcaldesa señala que todo ha vuelto a la normalidad y pide precaución ante un hallazgo de estas características.
Tensa e intensa la tarde noche de ayer martes en la playa de Salobreña, tras el hallazgo de un artefacto en el mar por parte de un bañista que lo trasladó hasta la orilla y lo llevó al puesto de Protección Civil, que lo comunicó a la Policía y se activó el protocolo de seguridad como se hace en estos casos.
Ocurría a media tarde, cuando un submarinista halló dicho artefacto, una especie de bengala o, por mejor decir, una bombona de fósforo rojo, que se utiliza en maniobras marítimas y también por pescadores.
La policía local junto con la Guardia Civil fueron los encargados de acordonar la zona, justo a la entrada de la playa, en una amplia superficie de seguridad y desalojar los establecimientos colindantes entre el Peñón y más allá de la Urbanización Mare Nostrum mientras llegaban los especialistas en desactivación de explosivos, los TEDAX, para hacer explosionar de manera controlada el artefacto, que esperaba en la arena de la playa. A la zona se desplazaron hasta dos dotaciones de bomberos de Motril y el retén de emergencias de Salobreña, así como la alcaldesa de la Villa, quien estuvo presente hasta que finalizó el dispositivo con la detonación controlada, en torno a las diez y veinte de la noche, momento en que la Guardia Civil retiró los cordones de seguridad. Antes, obligó a los presentes a retirarse a 200 metros del paseo marítimo, ya que este tipo de bombonas, aunque no revisten gravedad, contienen elementos químicos que entierra pueden convertirse en peligrosos. De hecho, la zona de la explosión quedó custodiada por la policía local hasta que a primeras horas de esta mañana operarios municipales han retirado los restos de la bengala.
Desde el inicio del dispositivo, la alcaldesa ha estado presente en tareas de coordinación y tranquilizando a los usuarios de la playa y zonas colindantes.
El Subinspector Jefe de la Policía Local detalló en un primer momento que se trataba de una especie de bengala de las que se utilizan en las maniobras militares y recomendó que en caso de encontrar un artefacto de esta características lo mejor es dejarlo en el lugar y avisar a las autoridades.
Los establecimientos de la zona tuvieron que ser desalojados por motivos de seguridad y así permanecieron hasta las diez y media de la noche, una vez que el equipo de artificieros de la Guardia Civil procedió a la detonación controlada, que, por cierto, produjo una explosión fuerte y levantó una gran humareda tras el puesto de Protección Civil en la entrada de la playa de la Villa donde se realizó la operación.
“Ya sólo nos queda el susto en el cuerpo”, ha señalado hoy la alcaldesa de la Villa tras señalar que todo ha vuelto a la normalidad en las playas del municipio y pedir precaución a los ciudadanos ante un hallazgo de estas características.
