La imagen que presenta este popular espacio es completamente renovada, con unas instalaciones que rompen con las líneas rectas y donde destacan los jardines y la nueva vegetación.
Esta mañana ha reabierto sus puertas al público el parque La Fuente de Salobreña, que permanecía cerrado desde el pasado mes de octubre. Lo que inicialmente se planteó únicamente como la renovación de los columpios, ha derivado en una remodelación integral de este espacio público, con un aspecto muy diferente al que lucía hasta ahora.
Si bien quedan pendientes algunos detalles de la obra, como la incorporación de mobiliario urbano y distintas tareas de jardinería, ello no es incompatible con el uso del parque, de modo que se ha decidido abrir para que pueda ser disfrutado por los usuarios. Lo mismo ocurre en los parques de Lobres y La Caleta, que también se han reabierto tras unos trabajos de rehabilitación, y aún están pendientes de distintos detalles.
El parque La Fuente cuenta ahora con una red de caminos de hormigón impreso que forma distintos espacios verdes con pequeñas dunas. Otro de los objetivos de esta nueva apariencia era darle una solución al problema que presentaban las raíces de los árboles, ya que este parque tiene una vegetación bastante dispersa.
Estas zonas verdes se han generado gracias a las tierras vegetales procedentes de los trabajos de urbanización del TH1. De momento solo se ve en ellos tierra y árboles, aunque en algunas semanas, cuando crezca el césped y finalicen las labores de jardinería, el parque lucirá en todo su esplendor.
Con estos nuevos senderos se suprime el albero que existía y que provocaba problemas tanto en días de viento como de lluvia. Ello supone además una mejora en el tránsito, pues facilitará la accesibilidad de personas con sillas de ruedas o carros.
Los trabajos en el parque se completan con un senador de madera que servirá como espacio de sombra, al que aún se tienen que añadir asientos, o la construcción de unos servicios para los visitantes que ya se habían ejecutado hace algún tiempo.
Las obras ejecutadas, excluyendo el parque infantil que se instaló gracias a una subvención de la Diputación, han supuesto una inversión de 55.000 euros, procedente de fondos municipales.
La modificación del acceso sur permite que el camino desde la playa hacia el pueblo o viceversa se haga más ameno, ya que en lugar de circular por la acera se podrá hacer también por el interior del parque, ya las puertas de ambos extremos quedan conectadas por caminos.
Los responsables municipales que han acudido esta mañana a la apertura del recinto han hecho un llamamiento a la ciudadanía para que cuiden el parque y lo mantengan limpio, pues “ha supuesto una inversión importante con el dinero de todos los contribuyentes”.
La situación de los patos es diferente porque viven en semilibertad, y además son elementos emblemáticos de este espacio verde de Salobreña, hasta el punto de que también se lo conoce como ‘parque de los patos’.
